Muchos clientes que no están familiarizados con el mundo de la traducción, optan por grandes agencias para llevar a cabo sus proyectos. Asumiendo así, que una gran empresa con tarifas elevadas asegurará un mejor servicio. Sin embargo, resulta necesario mencionar que muchas de estas grandes agencias no cuentan con un equipo interno de traductores en sus oficinas, y que es una práctica muy común el dividir los proyectos en partes que se derivarán y subcontratan a otras agencias más pequeñas, quienes a su vez, con frecuencia subcontratan el proyecto nuevamente. Con el proyecto pasando a través de tantas manos, no resulta extraño que cerca del 70% del importe que el cliente paga por un servicio de traducción vaya destinado a cubrir los márgenes de beneficio de todos los intermediarios antes de que el proyecto realmente llegue a manos del lingüista a cargo de la traducción. Si desea asegurarse que el dinero que usted paga es realmente invertido en una traducción de calidad en vez de una simple cadena de reenvíos de correos electrónicos, entonces considere enviar su proyecto a una agencia pequeña que cuente con traductores internos.
He visto que otras agencias cuentan con una lista de precios para sus servicios en su página web. ¿Por qué no encuentro ninguna lista de precios en Villengua?
El precio de una traducción depende de múltiples factores como el volumen, la complejidad del texto, la combinación lingüística, el formato y el plazo de entrega requerido, entre otros. Por ello, y para asegurar que todos nuestros clientes obtienen la tasación exacta de sus necesidades, en Villengua nos hemos decidido por no publicar ninguna lista de precios para nuestros servicios. En lugar de ello, facilitamos a nuestros clientes un presupuesto totalmente personalizado teniendo en cuenta los parámetros específicos del proyecto en sí.
Necesito la traducción de un gran volumen de documentos para el día siguiente. ¿Podría dividirse entre varios traductores?
En el caso de que fuera estrictamente necesario, sí se podría dividir el proyecto entre varios traductores con el objetivo de agilizar el proceso. Sin embargo, la coherencia de la traducción probablemente se vería mermada si trabajan varios traductores en el mismo documento, ya que cada traductor tiene unas preferencias y un estilo propio. Por estos motivos, habría que dedicarle más tiempo y dedicación a la fase de edición del documento para que este mantenga la coherencia y parezca que ha sido escrito por un solo traductor. En el caso de que cuente con el tiempo suficiente y de que su objetivo sea conseguir una traducción coherente y aprovechar al máximo su utilidad, le aconsejamos que el proyecto lo realice un solo traductor. Esta opción hasta podría ahorrarle tiempo (¡y dinero!) al final del día, ya que el documento no tendría que pasar por tantas fases de edición para mantener su coherencia.
Soy bilingüe. ¿Podría hacer yo la traducción?
Es genial ser capaz de dominar dos idiomas. Sin embargo, la traducción es una tarea compleja que requiere de muchos otros dotes aparte del de ser bilingüe. Los traductores profesionales son expertos en la lengua escrita; conocen el uso de diferentes técnicas de traducción, cuentan con competencias de traducción específicas en materia de investigación, utilizan programas informáticos que les permiten mantener la coherencia y evitar errores en el texto, etc. Además, cuentan con un dominio excepcional de los idiomas de origen y (quizás más importante) del idioma de destino, del que son nativos. Por ello, si desea realizar una traducción para su uso personal, entonces ¡adelante!. En el caso de que no sea para uso personal, lo mejor sería que la traducción la llevará a cabo un traductor profesional.
Hay muchas herramientas gratuitas de traducción instantánea en internet. ¿Podría utilizarlas en vez de contratar a un traductor profesional?
Si estos programas de traducción tienen mala reputación es por algo. Si se ha fijado alguna vez en un menú que se haya traducido con alguna herramienta gratuita de traducción instantánea sabrá de lo que le estamos hablando. Por supuesto que esto no significa que no sea útil en determinadas situaciones como, por ejemplo, cuando uno necesita saber la información concreta de un correo electrónico que ha recibido sin importar en demasía si el resultado es correcto o no. Sin embargo, si desea realizar una traducción para otra persona, le recomendamos que no utilice herramientas de traducción gratuitas, ya que la calidad de la traducción se ve mermada y puede dar una imagen poco profesional. Por si esto no fuera suficiente, muchos programas de traducción gratuitos se reservan el derecho de guardar y publicar sus datos (otra razón más para evitarlos).
El traductor que lleva a cabo mi proyecto hace muchas preguntas. ¿Significa esto que es un mal traductor?
En cuanto a este tema, es importante tener en cuenta el tipo de preguntas que hace el traductor. Hay que tener cuidado en el caso de que un traductor demuestre tener pocos conocimientos del idioma de origen y haga muchas preguntas acerca de las palabras (incluso cuando el texto que recibe es claro y está bien escrito). Sin embargo, el hecho de hacer muchas preguntas no significa que el traductor no sea competente. En muchas ocasiones, hacer preguntas es una señal que diferencia a un traductor profesional de uno aficionado, ya que significa que ha leído el texto encarecidamente y que intenta comprenderlo en su totalidad en lugar de hacer conjeturas cada vez que tenga alguna duda. ¡Las preguntas del traductor podrían incluso ayudarle a identificar los puntos débiles de su documento y mejorarlo!
Necesito hacer algunos pequeños cambios en el texto traducido. ¿Puedo hacerlo por mi cuenta?
Cuando hablamos de corregir textos traducidos, tenemos que tener mucho cuidado. Muchas personas creen que pueden hacer cambios en los archivos traducidos con la única ayuda de un diccionario, al fin y al cabo, “sólo es una palabra”. Sin embargo, los idiomas están estructurados de una forma muy diferente unos de otros, y hacer un mínimo cambio en el texto origen puede suponer realizar numerosos cambios en el texto final. Todo esto, sin contar con los errores de puntuación. Incluso aquí, cada idioma se rige por diferentes reglas, por ejemplo, el francés usa un espacio antes de los dos puntos, los signos de exclamación e interrogación, mientras que el inglés y el alemán no. Si necesita realizar algún cambio, la mejor opción es consultarlo nuevamente con el traductor.
Preguntas frecuentes
Hemos recopilado algunas de las cuestiones que más se plantean nuestros clientes para facilitar nuestra información. Si tiene cualquier otra duda, contacte con nosotros.